En los próximos meses varios fármacos superventas se enfrentan a la expiración de sus patentes. Compañías como MSD, Novartis, GSK o Lilly, tienen en sus portfolios medicamentos que tendrán que enfrentarse a la competencia del genérico, que ofrecerá precios más bajos por estos fármacos.
La consultora GlobalData ha elaborado un informe para tratar de analizar qué factores van a influir sobre el crecimiento de la industria farmacéutica durante 2019. Además de los propios que tienen influencia sobre la economía a nivel global, uno de los factores que se cuestiona, es el efecto que tiene flexibilizar o restringir las políticas de precios. Expertos en economía de la salud analizan las posibles tendencias en inversión, investigación, competencia o el impacto de los conflictos sociopolíticos en la evolución del mercado de los medicamentos.
En 2018, los biosimilares ‘apenas’ supusieron el 3 por ciento del mercado hospitalario. Incluso, en el área que mayor peso presupuestario y de lanzamientos ocupa, la Oncología, la penetración ‘baja’ al 1 por ciento. No obstante, muchas de las miradas en torno a estos medicamentos están puestas en los próximos años, cuando buena parte de biológicos perderán la patente. _Ahora bien, este factor no permitirá por sí solo el boom del biosimilar. La llegada de un bosimilar favorece los ahorros (precios en torno a un 20 por ciento más bajos que el original), un mayor uso de la molécula —y de los pacientes tratados—.... Pero no siempre debido a (costa de) un mayor uso del biosimilar. España aún adolece de un marco regulatorio favorable.